Archivos en la Categoría: la vida he!

¡Y va de nuez!

Luego de abandonar el blog tan pronto terminé mi última clase y semestre de la maestría… así como el ímpetu por titularme (que nunca he tenido al 100%)… debo resumir, que han sido tres meses productivos en otros temas lejanos a lo académico: en lo profesional y personal.

Tuve la oportunidad de participar en un proyecto de investigación de mercado con enfoque en diseño e innovación, volver al horario de oficina y a la dinámica de conocer, convivir y compartir más de ocho horas diarias con personas diversas fue un reto constante y que concluí con satisfacción. Aprendí mucho, en especial que nada es lo que parece y que cada minuto cuenta n_n

El título de «investigadora» me gusto… la experiencia mucho más, en especial porque me enviaron a campo, estuve cuatro días en Mérida, realizando de 8 a 10 entrevistas diarias, con personas seleccionadas previamente en el proceso y a las cuales conocía únicamente por mail. Fue interesante, desde el acento yucateco, la variedad de opiniones y entender finalmente cómo se da el llamado «rapport» con el entrevistado. Personalmente fue un reto, siempre he preferido ocuparme de tareas que no impliquen socializar, participar en este proyecto me obligo a romper mis propios miedos y a preguntar, a entender que la barrera entre una persona y otra no es impenetrable, todo es cuestión de cómo te diriges y cómo te expresas… cuando pasan los minutos iniciales y la persona te cuenta su historia cómodamente, eso es invaluable…

Como güinda en el pastel, conocí Chichén Itzá – ¡fue un domingo de lujo!, disfruto turistear en solitario, aunque en esta ocasión me hubiera gustado compartir la vivencia, había mucho por comentar… ya será para la próxima ocasión.

El análisis de la información recabada es otro tema, se pone difícil estructurar tantos datos y obtener hallazgos concretos, a veces todo parece muy obvio y se siente que no se avanza mucho… en esta etapa es cuando es muy útil tener opiniones externas, sé que en esta parte del proceso de investigación me queda mucho por aprender y es algo que obtendré a través de las futuras experiencias.

¡Y así se esfumaron dos meses y medio! Muy bien vividos y con geniales personas nuevas que ahora considero importantes en mi estancia en México.

Sin embargo, deje mi proyecto de titulación en pausa… indefinida, y hoy digo: ¡Va de nuez!, mi triste y dura realidad es que ya no soy becaria y tengo sólo dos meses más de vida asegurada en esta tierra maravillosa (aunque cruzo deditos porque eso cambie), por lo cual debo aplicarme y cumplir la meta – ¡Titularme!

A mi parecer empecé bien, hace más de un año seleccioné el tema y me emocionó encontrar tanta información, he leído todo lo posible y de hecho tengo sobrecarga de información que ahora es innecesaria, ¡ja!, mi alcance inicial era llegar a la luna (o por lo menos eso creí) y me sentí capaz, pero noooo, me he perdido, he dado vueltas, he tenido la orientación valiosa de mis profesores y aún así no me he sentado a redactar el documento completo.

Cambié de hacer una Tesis a la opción de Estudio de Caso, y sí… eso me mueve todo lo que aparentemente había avanzado… pero seguiré las sabias palabras de mi madre: ¡Deja de enredarte!, haz un trabajo digno para titularte y deja de perder el tiempo. Por eso mi madre es lo máximo, sabe jalarme las orejas en el momento exacto.

Así que me he propuesto algo, ya que soy adicta al internet y pierdo tanto el tiempo en redes sociales (¡sí!, benditos Facebook y Twitter), me obligaré a escribir a diario en el blog, a manera de cuenta regresiva… empiezo hoy martes 27 de julio 2010 y para el próximo lunes 27 de septiembre mi proyecto debe estar ya aprobado por mi directora y mis lectoras… lo que significa que deberé estar pidiendo la fecha de examen para octubre… si no cumplo estoy moriré de vergüenza, ¡he dicho! (¡y que me ayude Diosito!)

Tan tan…